Todos sabemos que la leche y los productos lácteos le aportan a nuestro cuerpo el calcio necesario para mantener nuestros dientes y huesos sanos y fuertes. Sin embargo, existen otros alimentos que te ayudan a proteger tus dientes. Lee esta nota para aprender más.

 Fruta fresca

Además de aportar vitaminas A, B y C, las frutas son un excelente alimento para cuidar los dientes. Su alto contenido de fibra estimula el flujo de saliva, la cual es una defensa natural contra las caries. La saliva enjuaga naturalmente tu boca, ayudándote a eliminar los restos de comida que suelen acumularse entre los dientes y neutralizando los ácidos que los atacan.

Al consumir frutas como kiwi, melón o sandía estarás ingiriendo los nutrientes necesarios para mantener también tus encías sanas y evitar úlceras bucales. ¡Satisface esos antojos dulces con una alternativa saludable!

Verduras

Igual que las frutas, las verduras aportan gran cantidad de nutrientes, vitaminas, minerales y fibra para mantener tu boca sana. Cuando masticas vegetales de hoja o los duros como la zanahoria y el apio, estarás endureciendo la mandíbula y encías. Recuerda que, cuanto más mastiques, más saliva producirás, y ya sabes los beneficios que trae la saliva para nuestros dientes.

 

¡Aprovecha la temporada de verano para comer más ensaladas! Además de comer un plato fresco y mantenerte saludable, estarás contribuyendo a tu salud bucal.

Té verde

El té en general es una bebida saludable — siempre y cuando lo consumas sin azúcar— pues contiene compuestos que inhiben las bacterias que producen la pérdida de dientes y enfermedades en las encías. Además, posee antioxidantes y evita que la placa se adhiera a los dientes.

Pescados

La carne de pescado es ampliamente conocida por el alto contenido de omega-3 que aporta al organismo pero, ¿sabías que también tiene un gran impacto en tu salud bucal? Mariscos y pescados como la sardina contienen flúor, lo cual ayuda a prevenir la aparición de caries. Además, el omega-3 también ayuda a tu cuerpo a absorver el calcio, lo cual tiene un impacto inmediato sobre tus dientes.

Agua

Ya lo dijimos, pero nunca está de más recordarlo: mantener la boca correctamente hidratada ayudará a mantenerla libre de mal aliento. Además, al enjuagar naturalmente tu boca, ayudarás a eliminar los restos de comida y a limpiarla de ácidos y azúcares que puedan permanecer, afectando tu salud bucal.

 

Recuerda cepillar tus dientes tres veces al día, y no dejes de utilizar hilo dental. ¡Con una adecuada salud oral, tus visitas al dentista serán más placenteras!

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